Ayer

Ella viene, me alerta, me alegra, me altera.
Destapas nudos, enojos, sorbos, gorgojos, gordos, cangrejos, añejos, motores, destrozo, mis moños para compartirlo y es un trailer, muchas ruedas, con muchas cargas, demasiadas vueltas .
Ella, mi compañera, sonetos, reviento, me río, me alegro, son muchos y pocos los momentos felices, efímeros, tristes.
Es ella, bella, esbelta, sirena.
Camina, se empina, avanza, amenaza, amanece, se envuelve, se estira, me abraza, me aplasta, me cansa, me arropa, me quita la ropa, la piel, mis huesos también, mi alma le acompaña, le peina, le canta, bailan, se cogen, se arañan, desarman, descansan, se vuelven todo y nada, nadando en el mar de sosiego-locura, sin puros, apuros, sin culpa, con porros, con putas y mierdas, nos caemos bien, mal, da igual, sí.